Jesús nos ha prometido su presencia en medio del sufrimiento y la persecución, y debemos tener Seguridad en Él y echarse en brazos en su apego inmortal por nosotros. Con su ayuda, podemos ser testigos valientes frente a el mundo y sufrir su mensaje de apego y salvación a todos los rincones del planeta.

B. Dios es soberano sobre el sufrimiento. Aunque Satanás es quien causa que Job sufra, tuvo que obtener el permiso de Dios para hacerlo. Servimos a un Dios que «hace todas las cosas

Esto significa que debemos ser firmes en nuestra Certeza y no renunciar a ella frente a el rechazo de las personas.

Por consiguiente, en Jesucristo compasivo con los que padecen, crucificado por nuestra salvación y resucitado para darnos vida, el enigma del sufrimiento humano se transforma en la máxima manifestación y comunicación en el mundo del Aprecio infinito de Dios.

Los amigos tratan de convencerlo de que los males que lo aquejan son efecto de alguna desatiendo, pero Job proclama constantemente su inocencia.

Hay una escuela poco querida, pero obligada por la vida, una escuela a la que todos tenemos que asistir tarde o temprano, es la escuela del sufrimiento.

Debemos estar firmes en nuestra Confianza y ser testigos valientes en presencia de el rechazo de la Familia, sabiendo que Jesús nos distinguirá en presencia de su Padre celestial.

Jesús nos da un ejemplo consumado al fallecer en la cruz por nuestros pecados, mostrando que Él tenía confianza en su Padre celestial y estaba seguro de su valor como Hijo de Dios.

4. El sufrimiento de Cristo nos invita a cargar nuestra cruz: Jesús nos animó a tomar nuestra cruz y seguirlo. Esto implica aceptar las dificultades de la get more info vida con humildad y confianza en Dios, sabiendo que Él está con nosotros en todo momento.

En conclusión, la relevancia del sufrimiento de Cristo en la salvación de la humanidad es central en la Certeza cristiana. Nos muestra el inclinación de Dios, nos recuerda nuestra necesidad de salvación y nos llama a vivir en reconocimiento y entrega a Dios.

A pesar de las dificultades y el sufrimiento que podrían contraponer, es crucial recordar que valen más que cualquier cosa en este mundo, pues Dios cuida sus vidas desde los cabellos de su inicio hasta el último detalle.

La esperanza en él nos libera del miedo al futuro y de la incertidumbre. Sabemos que nuestro Dios es bueno, nos conoce y podemos esperar en que nos dará la fortaleza necesaria para contraponer las dificultades que nos traiga la vida (Nahum 1:7).

La esperanza del retorno del Hijo del hombre nos inspira a continuar predicando el evangelio en medio del sufrimiento y la traición, con Convicción firme y confianza en Dios.

Que el Dios de la esperanza los llene de alegría y de paz en la Confianza, para que la esperanza sobreabunde en ustedes por obra del Espíritu Santo.